Fragomeno, filósofo argentino radicado en nuestro país, procura abrir un diálogo en torno al pensador y para ello caracteriza distintos papeles que han jugado y juegan los intelectuales latinoamericanos, rescata de ellos algunos elementos y emite otras tantas críticas. Así encontramos una lectura del intelectual populista, del teólogo de la liberación y del "intelectual posmoderno". Finalmente recurre a Michel Foucault y Jurgen Habermas, los lee en función de la praxis y propone un "intelectual estratégico", uno que "pretende la exactitud del problema del presente", tan lleno de rigurosidad como de contenido utópico. Y la utopía en su mejor sentido: la que busca eliminar de las asimetrías.
Fragmento de la nota de Bértold Salas en revista Áncora