AUTORES: 23 jóvenes ticos entre los 11 y 19 años
La publicación Ticos en Chepe recoge 50 fotografías en blanco y negro tomadas por muchachos de comunidades urbano-marginales como Los Guido, Hatillo, Sagrada Familia, San Sebastián y la 25 de Julio, entre otras. Ellos captaron las imágenes tras un taller impartido por el francés François Perri acerca de la técnica de la caja oscura –conocida como estenopeica–. Este es el tipo más básico de “cámara fotográfica”: una caja o tarro con un pequeño agujero por donde entra la luz hasta el papel fotográfico en su interior. En el libro se observa un muestrario de imágenes en que hay agudeza, sarcasmo, dulzura y cierto aire de inocencia. Los jóvenes retratan un San José lleno de hitos urbanos, pero también de pobreza y contradicciones. Según su mirada, es una capital de gente trabajadora, pero también de indigentes y personas que aguardan un futuro mejor; una ciudad de rejas, grafitis y también de edificios emblemáticos. Las obras no aparecen firmadas porque se presentan como fruto de un trabajo colectivo en que intervinieron muchachos como Patricia Arias, Alfredo Obando, Nelson Ocampo, Víctor Salas, Andrea Zamora, Rándall Tencio, Joselyn Álvarez y Dylan Ruiz.
Fragmento de la reseña de Doriam Díaz en periódico La NaciónLa publicación Ticos en Chepe recoge 50 fotografías en blanco y negro tomadas por muchachos de comunidades urbano-marginales como Los Guido, Hatillo, Sagrada Familia, San Sebastián y la 25 de Julio, entre otras. Ellos captaron las imágenes tras un taller impartido por el francés François Perri acerca de la técnica de la caja oscura –conocida como estenopeica–. Este es el tipo más básico de “cámara fotográfica”: una caja o tarro con un pequeño agujero por donde entra la luz hasta el papel fotográfico en su interior. En el libro se observa un muestrario de imágenes en que hay agudeza, sarcasmo, dulzura y cierto aire de inocencia. Los jóvenes retratan un San José lleno de hitos urbanos, pero también de pobreza y contradicciones. Según su mirada, es una capital de gente trabajadora, pero también de indigentes y personas que aguardan un futuro mejor; una ciudad de rejas, grafitis y también de edificios emblemáticos. Las obras no aparecen firmadas porque se presentan como fruto de un trabajo colectivo en que intervinieron muchachos como Patricia Arias, Alfredo Obando, Nelson Ocampo, Víctor Salas, Andrea Zamora, Rándall Tencio, Joselyn Álvarez y Dylan Ruiz.